
Una estrategia integrada para minimizar la huella hídrica y avanzar hacia una industria más eficiente y responsable.
La eficiencia empieza bajo tierra
El agua que utilizamos proviene de pozos propios. A partir de 2023, decidimos dar un paso adelante. Con una combinación de mejoras técnicas, gestión inteligente y compromiso ambiental, hemos reducido un 36 % el consumo de agua captada. Este logro responde a acciones como la detección de fugas, circuitos cerrados de refrigeración, optimización del lavado técnico y el rediseño de zonas ajardinadas. El reto para 2025 es mantener la tendencia y consolidar un descenso acumulado del 15 % respecto a 2024.
Innovación aplicada al ciclo del agua
Las aguas residuales se tratan y se reutilizan siempre que es posible. También se está implementando un sistema de monitorización diaria para controlar puntos de uso y optimizar consumos en tiempo real.
ODS 6 y ODS 12: compromiso real
Este proyecto se alinea con el ODS 6 (Agua limpia y saneamiento) y el ODS 12 (Consumo responsable). No hablamos solo de tecnología, sino de repensar el valor de cada recurso. Minimizar el impacto sin perder eficiencia.
¿Y ahora qué?
La sostenibilidad no es un objetivo, es un proceso. Un camino que seguimos con datos, tecnología y responsabilidad. En el próximo artículo explicaremos cómo esta misma filosofía nos ha llevado a eliminar el amianto de todas las instalaciones y a preparar la transición energética con fuentes renovables.